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Los 10 mejores trucos para salir bien en tus fotos profesionales

Como posar en una sesión de fotos

Salir bien en las fotos de un book es imprescindible y aquí vas a aprender los mejores trucos. Porque un book profesional y con gusto es la tarjeta de presentación que nos va a abrir las puertas o dejarlas cerradas.

Y esta es la realidad de las cosas, que no podemos enseñar a ser guapos, pero sí a ser fotogénicos.

Por eso vamos a ver aquí los 10 mejores trucos para salir bien en fotos profesionales y, en general, en toda clase de fotografías.

Lo mejor de todo es que estos trucos son muy sencillos y no requieren más que un poco de práctica en el espejo o ante el objetivo, para que pronto los estés usando de manera natural.

Lo más importante antes de empezar

Aunque vamos a ver 10 trucos que funcionan para salir bien en las fotos de nuestro book, lo más importante es que trabajemos con un fotógrafo verdaderamente profesional, y le hagamos caso durante la sesión.

Nos guiará sobre lo mejor en nuestro caso, es el experto y sabe bien qué funciona, qué no y cómo sacarnos partido.

Por eso es fundamental que dediquemos tiempo a contemplar distintas opciones y que elijamos siempre a un verdadero profesional.

Si esas fotos van a ser nuestra tarjeta de presentación, tenemos que invertir en ellas, porque el refrán de que lo barato sale caro es más cierto que nunca en este caso. Por otro lado, si somos el fotógrafo, tenemos que conocer estas técnicas para guiar al modelo, especialmente al no profesional.

Y dicho esto, vamos con los 10 mejores trucos para salir bien en las fotos.

  1. La importancia de la línea de la mandíbula

Vamos a mostrarte 10 cosas que funcionan, pero como en todo, hay algunas más importantes que otras.

Pues bien, este truco y el siguiente son más importantes que los demás para salir bien en una foto en general. Lo ideal es que, cuantos trucos más sepamos, mejor, pero este consejo y el siguiente tienen que ver con lo principal en la foto, nuestro rostro.

Él será lo que más capte la atención en las fotos y es necesario que sea lo más perfecto que podamos. Para ello, lo mejor es empezar con la mandíbula.

La línea de la mandíbula es lo que define la forma de la cara y lo que le da su personalidad propia, por eso es importante resaltarla y no diluirla.

A pesar de que el ángulo de la cámara es importante para eso, y de hecho cuando conectamos la cámara del selfie en nuestros móviles por error casi siempre salimos mal por culpa de que está en la posición menos favorable, mucha gente tiende a diluir la mandíbula echando la cabeza para atrás, por ejemplo, especialmente cuando se hace una foto a sí mismo.

La cámara, a veces, nos intimida un poco y, si está especialmente cerca, tendemos también a echarnos un poco hacia atrás.

Grave error. Lo mínimo es que diluyamos esa línea de la mandíbula, lo máximo es que nos salga esa antiestética papada que no tenemos cuando estamos relajados.

Así que el truco es justo el contrario a ese. ¿Hay un objetivo mirándonos? Echemos la cabeza un poco hacia adelante y un poco hacia abajo.

Hemos de insistir en el «un poco». Para ello, simplemente estiremos levemente el cuello hacia adelante y acerquémonos uno o dos centímetros hacia la cámara, bajando la mandíbula otro poco.

Estamos hablando de apenas poco más de un centímetro, si exageramos bajando, por ejemplo, seremos como esos boxeadores que protegen la mandíbula contra el cuerpo y de nuevo sacaremos la terrible papada.

Este movimiento, bien ejecutado, estirará el cuello, deshará la papada, nos estilizará y destacará la línea de la mandíbula, contrastando contra el cuello y perfilando bien nuestro rostro.

El gesto nunca es forzado, no tenemos que ser como tortugas estirándose del caparazón, un imperceptible movimiento hacia adelante ya lo solucionará.

Como en todos los trucos que veremos, la tónica es no forzar y hacerlo natural.

  1. La importancia de los ojos

Cuando uno se empieza a fijar en los actores famosos sobre la alfombra roja, empieza a detectar algo en sus miradas.

A todos les enseñan pronto este truco (junto con el de la línea de la mandíbula que hemos visto) y que mejora nuestra mirada y nuestra expresión.

Como pasa muchas veces, para saber lo que hacer, lo primero es saber qué no hacer. Antes era no echar bajo ningún concepto la cabeza hacia atrás y ahora es no abrir demasiado los ojos.

Ocurre que a algunos les intimidan las cámaras y eso se refleja en la mirada, ojos demasiado abiertos, como cuando estás delante de alguna amenaza.

En general, mostrar demasiado blanco en los ojos no es una buena señal para una fotografía a menos que sea porque queremos retratar intencionadamente algo así, de modo que este truco, que pronto detectarás en muchas fotos de actores cuando te fijes a partir de ahora, consiste en lo que en inglés se llama el squinting.

Es decir, entrecerrar un poco (de nuevo insistimos en el «un poco») los ojos, como cuando miras algo con mucho interés y quieres enfocarlo mejor, o han dado de pronto una luz y reaccionas entrecerrando levemente los párpados.

Sesión de fotos Making of

El actor Chris Pratt realizando el gesto de entrecerrar un poco los ojos.

De hecho, el primer concepto nos da la pista para la mirada que queremos. Imaginemos que tenemos algo muy interesante delante nuestro y cerramos un poco esos párpados para mirarlo mejor y mostrar interés.

  1. La importancia de la sonrisa

No siempre se nos va a pedir una gran sonrisa en nuestra sesión para el book de fotos, pero la habilidad de aprender a sonreír y que eso salga bien retratado es fundamental.

Para eso, nada mejor que este viejo pero efectivo truco, que también se suele enseñar a todos los que pasean a menudo por las alfombras rojas.

Cuando sonrías, pon la lengua tras tus dientes y presiona un poco, así evitarás una sonrisa demasiado excesiva y, sobre todo, esa sonrisa exagerada que deforma el rostro y parece forzada.

  1. La importancia del color en el rostro

Normalmente estaremos maquillados para nuestra sesión de fotos, a fin de evitar reflejos, sudor y demasiada palidez. Pero muchas veces esto no es posible o nos van a tomar unas fotos improvisadas.

Para mejorar nuestro rostro, he aquí otro truco de la vieja escuela.

Ve un segundo al baño, limpia la cara frotando con una servilleta o pañuelo y pellizca las mejillas para aumentar la circulación y tener un aspecto más sonrosado y saludable.

  1. La importancia de los ángulos

En la mayoría de ocasiones, estar directamente enfocados hacia la cámara no suele ser el ángulo más favorable.

Ladearnos un poco y no ofrecer una confrontación directa puede ser mucho más favorecedor en la mayoría de situaciones. Nos estilizará para empezar, y proporcionará perfiles más interesantes.

En el caso del rostro, gira un poco, como un cuarto hacia tu mejor perfil. En el caso del cuerpo puedes hacer lo mismo, girarlo de nuevo un poco para no ofrecer directamente el torso, sino resaltar las líneas del cuerpo. Podemos girar la cara, de hecho, pero mirar a la cámara, proporcionando un contraste interesante.

Como posar en sesión de fotos

El actor Ryan Reynolds mostrando cómo ofrecer un ángulo a la cámara favorece

En muchos casos, el fotógrafo profesional nos guiará en esto, dirá qué perfil quiere y hacia dónde quiere el rostro, pero hemos de saber este truco de manera natural para salir bien en las fotos.

  1. La importancia de practicar ante el espejo

La práctica hace la perfección y estos trucos no son la excepción. Te hemos dado el necesario para salir con la mejor sonrisa y, sobre todo, para no salir con la menos favorecedora, pero es importante tener un rango de sonrisas y, sobre todo, salir natural.

De hecho, las mejores fotos suelen ser esas que no sabemos que nos están haciendo, precisamente porque, sin querer, nos tensamos en las fotos que sí sabemos que vienen.

Aunque parezca paradójico, lo mejor para conseguir esa relajación natural es practicar ante el espejo.

En general, hemos de practicar todos estos trucos, pero sobre todo las sonrisas, el echar un poco el rostro hacia adelante, entrecerrar los ojos y los ángulos.

Así calibraremos bien que no estamos forzando.

Practicar a menudo nos ayudará a quitarnos esos nervios y, curiosamente, a ser más naturales ante el objetivo.

  1. El truco para los ojos siempre abiertos

No hay nada más decepcionante que salir con los ojos cerrados en una foto o, peor incluso, a medio cerrar.

Pues bien, he aquí el truco para que eso sea cosa del pasado.

Justo antes de que la cámara vaya a disparar, pestañea para que el ojo descanse y no tenga la tentación de hacerlo a medio disparo. O incluso, si puedes, cierra los ojos durante un segundo justo antes de que se dispare y abre entonces.

Con los ojos descansados nos aseguraremos de que no vamos a pestañear ni forzar, especialmente cuando usamos también el truco de entrecerrar los párpados.

  1. El mejor truco de belleza

El mejor tratamiento de belleza, para hombres y mujeres, es una noche de sueño reparador, y eso es lo que debemos procurar como sea antes de nuestra sesión de fotos para salir perfectos en ella.

Puede que un buen maquillador cubra las ojeras, pero, aún así, mejor no tener que hacerlo, además de que nada puede ocultar una vista y una expresión cansadas.

Además, todos estos trucos anteriores se resentirán si no hemos dormido bien.

  1. La naturalidad es la clave

Aunque parezca más fácil de decir que de hacer, en realidad no lo es. Efectivamente saldremos mejor en las fotos cuanto más naturales seamos ante la cámara, y ¿cómo podemos conseguir esto?

Haciéndonos infinidad de fotos.

Quien se hace pocas, no sabe bien cómo sale y teme la cámara.

Quien se ha hecho muchas, se acostumbra, como a todo en la vida y, de hecho, muchos adquieren de manera natural una fotogenia a base de estar ante los focos constantemente.

Que es un book de fotos

La actriz Jennifer Lawrence mostrando la naturalidad que da la practica

En gran parte, la fotogenia es una habilidad.

  1. Bromea y pásalo bien

¿Quieres la sonrisa perfecta y la expresión más favorecedora? Relájate, bromea con el fotógrafo, siéntete cómodo.

No hay sonrisa, incluyendo la del truco que hemos dado, que supere a una realmente sincera.

Si consigues pasarlo bien y tomar confianza, estarás relajado y natural, que es como mejor salen las fotos, que no sólo reflejan el rostro y el cuerpo, sino la incomodidad o no que se lleva por dentro.

Elimínala, sigue estos 10 trucos para salir bien en las fotos de tu sesión (profesional o no) y pronto todos envidiarán tu fotogenia.

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