Si nos decidimos por un book de fotos para principiante profesional es interesante tener algunas nociones de cómo posar frente a una cámara, es verdad que el fotógrafo nos va ayudar en todo momento pero no está demás seguir algunos consejos para una sesión fotográfica profesional.
A la hora de ponerse enfrente de una cámara lo más importante es estar tranquilo y actuar con naturalidad, sobre todo si es la primera vez que posamos. No es necesario forzar la postura del cuerpo, la sonrisa o cualquier otro elemento que nos haga sentirnos incómodos pues esto quedará reflejado en la fotografía. Evita las posturas rígidas y las sonrisas forzadas; y si hay que mirar a la cámara ante todo no tengas vergüenza y confía en ti mismo.
En el momento de elegir el vestuario para la sesión debemos evitar todo aquello con lo que no nos sintamos a gusto o no sea favorecedor. Es interesante contar con más de un cambio de ropa para tener diferentes posibilidades, además el fotógrafo nos puede ayudar a elegir la que mejor resalte nuestra imagen. Es importante sentirse cómodo y elegir elementos que resalten nuestra figura.
Las fotografías pueden ser tanto en interior como exterior, aprovecha todos los elementos que haya a tu alrededor para mejorar tu pose. En un estudio te puedes ayudar de muebles para sentarte o apoyarte y de algún objeto para coger con las manos; si las fotos son en el exterior, siéntete parte del paisaje.
Previamente el fotógrafo nos informará de cómo va a ser la sesión y todas las pautas a seguir, además de guiarnos en todo el proceso, por lo tanto solo tienes que disfrutar de la sesión y sacar lo mejor de ti.